Por Luis Córdova
Las gradas aplauden al malabarista que, entre la magia y el espanto, gira en espirales de fuego de su espectáculo.
Visto a la distancia, parece fácil. La práctica hace al maestro. Si bien el peligro seduce, también nuclea, consigue compactar la masa de espectadores y hasta antiguas estrellas del circo.
Nadie ignora, es un secreto a voces, que quien juega con fuego, en algún momento, se quema.
05 Noviembre 2021 | http://www.elcentineladigital.com.do/perspectiva-noticiosa/jugar-con-fuego