Por Luis Córdova
En una ciudad en la que muy pocos se detienen a llorar sus muertos, los caminos que se extienden en avenidas de caótico tránsito que parecen llevarnos a ningún lugar.
Alguien mira con extrañeza el libro que llevo en mis manos. No sospecha, su espanto fuera mayor, que ese objeto que le resulta extraño es una colección de poemas del inmenso Jorge Luis Borges.
Al otro que me escruta, también quisiera otear en sus miserias: juzgarlo inmisericordemente.
Y así vamos viviendo un calendario de olvidos y soledades.
El otro, que quizás sea el mismo: quien llega hasta nuestro solar, quien inicia el éxodo. Ese otro con el cual peleamos por los mismos abstractos que nunca serán nuestros.
El otro que imaginamos -que nunca ha existido más allá de nuestra imaginería-, a esa persona que amamos o que odiamos, con quien rivalizamos o a quien admiramos… debemos desaprender a odiar.
08 Diciembre 2021 | http://www.elcentineladigital.com.do/perspectiva-noticiosa/el-otro-el-mismo