Algunas cosas han cambiado desde el pasado diciembre en mi vida.
Por ejemplo ahora las oportunidades son bendiciones; lo que antes llamaba "suerte", ahora digo es el plan de Dios para mi.
Cuando me molesto veo en ello una oportunidad para humillarme delante del Señor y reconocer mi humana debilidad.
He aprendido a ser humilde de corazón y entender cuanto me falta!
Ahora sé que nada vale mi esfuerzo, si no cuenta con su Gracia.
Ahora no tengo miedo a perder cosas y personas, porque de la nada Dios ha ido dándome todo, en su justo momento!
El ha cambiado el lugar de mi felicidad. Ya no esta en el bolsillo, ni el carro, ni la camisa... A todos los perdí y Dios está restaurando.
Su promesa fue cumplida: no hay justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan!
El ha cumplido!
Que vuelta tan larga tuve que dar para darme cuenta que nunca debí abandonar el Camino!
Desde diciembre siento la inmensa paz de trabajar con la certeza de que todo llegará!
Que el milagro de la solidaridad ha llegado a mi vida y pone gracia en nuestro andar.
Ahora que hace exactamente un año lo conocí y palpo su misericordia quiero que cada paso del camino me lleve a El!
